Un cuento del mar
Lectura
2
Érase una vez un niño que tuvo la suerte de
conseguir un barco para él solo. Era un velero enorme; pero el niño era experto
en cosas de vela y lo podía manejar sin ayuda.
Durante algunos años, navegó de isla en isla.
Pero un día el tiempo empezó a empeorar. El cielo se llenó de nubes y el viento
comenzó a soplar con tanta fuerza que las velas quedaron hechas jirones.
El niño se dio cuenta enseguida de que aquella tormenta estaba dirigida contra
él por algún enemigo que sabía magia negra; por eso bajó al camarote, cerró
la puerta y esperó a ver qué pasaba.
–¡Ja, ja! ¡No pienses que estás solo! –dijo
una voz perversa y cruel a sus espaldas.
El niño se volvió asustado y vio a un loro en
la librería del camarote.
–¡Oh, Dios mío! –dijo el niño–. ¡Qué susto me
has dado!
Pensé que eras la bruja que ha causado la
tormenta. El loro ladeó la cabeza y se rascó la oreja
con la pata, lanzando de nuevo una larga y perversa
carcajada. Entonces, para sorpresa suya, el niño vio que el loro comenzaba a
transformarse. Sus alas se convirtieron en brazos largos y escuálidos; su pico,
en una gran nariz aguileña; y sus brillantes plumas, en harapos chillones y
andrajosos.
Cuando el niño vio que se trataba de una
bruja, comenzó a avanzar poco a poco hacia la estufa del camarote, donde
guardaba su badila 1 mágica. Pero la bruja le dijo:
–Sé lo que estás buscando. ¡Tu badila mágica!
¡Ja, ja! La he puesto en un lugar seguro, donde tú no la encontrarás,
jovencito.
–Eso es lo que tú te crees –dijo una voz
enérgica desde las escaleras del camarote. Y para sorpresa de ambos, la badila
apareció y arremetió contra la bruja.
–¡Bien! –decía el niño complacido–. ¡Dale
duro!
¡Échala fuera!
La pequeña y simpática badila persiguió a la
bruja hasta cubierta. Una vez allí, la bruja saltó al mar por la borda,
pensando en que flotaría y podría ponerse a salvo. Pero no contaba con que la
badila mágica había realizado un cambio maravilloso: había transformado el mar
en dragones, que, tan pronto como vieron a la bruja, abrieron sus blancas y
espumeantes mandíbulas y se la tragaron. Luego, los dragones comenzaron a
alejarse en diferentes direcciones y el barco fue descendiendo, hasta que quedó
sobre el arenoso fondo de lo que había sido el mar. El niño estaba muy
emocionado al ver las maravillas del fondo del mar. Entre ellas, vio los restos
de un viejo galeón español cubierto de algas y percebes. Enseguida descendió
por un costado de su barco y corrió por la arena a explorar el buque
naufragado. Estaba lleno de cofres de oro y alhajas. El niño cogió algunos
cofres y los almacenó en la bodega de su velero. Pero una vez hecho esto,
comenzó a preocuparse. ¿Cómo saldría de allí? ¿Cómo iba a navegar si no había
mar por donde hacerlo?
Volvió al galeón y continuó explorando;
entonces encontró un extraño martillo con una inscripción mágica:
Cuando las aguas desaparezcan, da tres
martillazos en el fondo.
El niño cogió el martillo y golpeó la roca.
De repente, el agua comenzó a brotar del suelo a borbollones, como si todas las
tuberías de la Tierra hubieran estallado. No había tiempo que perder, así que
corrió hacia su barco, y antes de que el agua le llegara hasta la barbilla,
consiguió subir a bordo.
Mientras tanto, el agua rugía, se
arremolinaba y subía más y más deprisa. Al poco rato, el niño notó que su barco
comenzaba a bambolearse, se elevaba y quedaba flotando.
Cuando el barco estuvo flotando de nuevo, el
niño colocó las velas de repuesto y puso rumbo hacia las playas de su tierra
natal; allí desembarcó finalmente con todas las alhajas y el oro que había
sacado del galeón español.
RICHARD HUGHES
El perro prodigio (Adaptación)
1. Contesta.
• ¿Quién salvó al niño?
• ¿Por qué a la bruja no le importó saltar
por la borda?
• ¿Dónde guardaba el niño su badila mágica?
• ¿Cuándo flotó de nuevo el barco del niño?
2. Marca en cada
caso la respuesta correcta.
• ¿Cómo es la lectura «Un cuento del mar»?
Realista.
Científica.
Fantástica.
3. ¿Por qué motivo el niño consiguió salir
bien librado de sus aventuras?
• Porque recibió buenos consejos.
• Porque era rico.
• Porque intervinieron hechos mágicos.
4. El barco que descubrió el niño era un galeón.
Escribe el nombre de cinco
tipos de embarcaciones que conozcas.
5. Completa con una
de estas palabras
Cubrir • encubrir • descubrir • recubrir • cobertizo
• cubierta • cobertura • cobertor
• La
badila persiguió a la bruja hasta …
• El niño ………. maravillas en el fondo del mar.
Con su barco, los navegantes …………. grandes distancias
• Se hizo cómplice cuando …………. al autor del
delito.
• Una delgada capa de hielo ……… la antena de
televisión.
• El coche está aparcado bajo el ………… del
jardín.
• Cuando haga frío, pondremos un nuevo ………. en
la cama.
• Nadie dará ………….. a un negocio tan
arriesgado.
COMPRENDO LO QUE LEO
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